Tiempo de crear
La mirada contemplativa descubre a Dios en la hondura de lo real, en el fondo de las fragmentaciones que atraviesan hoy pueblos y personas. Dios no está inactivo, como un espectador distante, sino implicado, sacando vida nueva del «caos» y «del abismo» como el primer día de la creación. A Dios no se le ha acabado el amor por nuestro mundo, ni está agotada su fantasía creadora. ¿Qué es lo nuevo que Dios nos propone hoy para crearlo juntamente con nosotros? Dios siempre nos espera para recomenzar con nosotros allí donde hemos dejado sin completar un proyecto, una palabra, un perdón ...