Three Little Pigs / Los Tres Cerditos

Teddy el osezno gruñón­­ perdió su sonrisa, y solo un oso sabe cómo encontrarla. Después de muchas búsquedas, Teddy descubre la alegría que proviene de ayudar a los demás.

Mía y Julia son dos hermanas que no paran de meterse en líos cada dos por tres. Julia, que tiene trece años, intenta por todos los medios que su hermana pequeña no le estropee los planes con sus amigas, mientras que a Mía, que tiene ocho, siempre se le ocurre alguna travesura para fastidiarla. Sin embargo, en el fondo las dos se quieren con locura y son inseparables. Sobre todo, cuando se avecina una bronca de mamá... Pero las dos guardan un gran secreto. ¿Serán capaces de evitar que mamá lo descubra? Julia Menú García nos cuenta en su primer libro las locuras más disparatadas y...

Todos conocemos el cuento de los tres cerditos y el lobo feroz. Pero el papá de los protagonistas decidió que a él no le gusta tanto. Este cerdo es práctico, honrado y trabajador, así que saldrá al mundo a defender a sus hijos del malvado lobo, cueste lo que cueste. Triunfo Arciniegas retoma un tema clásico y le da un gran giro de tuerca. Adéntrate en esta historia menos conocida pero mucho más original.

Número 8 de la colección «Magos del humor». ¡Zipi y Zape vivirán aventuras como si fuesen caballeros andantes! Don Pantuflo encierra a Zipi y Zape en la biblioteca de casa, a causa de una de sus trastadas habituales. En sus manos cae el clásico de caballería Don Quijote de La Mancha y se proponen emular las andanzas del ingenioso hidalgo. Intentarán salvar a una mosca que se ha enredado en la tela de una araña, harán que un gato no consiga acabar con la vida de un ratoncito, ayudarán a un empleado para que su jefe no abuse de él, conseguirán que un desalmado no le haga el timo...

Había una vez una sensata línea que estaba perdidamente enamorada de un punto. "Tú eres el principio y el fin, el eje, el núcleo y la quinaesencia", le decía con ternura, pero el frívolo punto no estaba ni un poquito interesado, pues sólo tenía ojos para una desparpajada línea curva. la recta, sin embargo, se encargó de demostrarle lo maravillosa que podía llegar a ser.