Los discípulos de Baco

El país de las pieles se publicó por entregas en la revista Magasin d’Education et de Récréation desde septiembre de 1872 hasta diciembre de 1873 y apareció ya como libro en dos volúmenes, también en 1873. El autor francés narra en esta ocasión el viaje al norte de Canadá (cabo Bathurst, océano Ártico) de la Compañía Comercial de la Bahía de Hudson. La expedición la dirige el teniente Jasper Hobson, a quien acompaña la eminente señorita Paulina Barnett, y a ellos se une en el último momento el astrónomo Thomas Black, con el objetivo de observar un eclipse de luna. El...

Pete Dugan nunca pensó que volvería a ver a Carol, cuyo maravilloso rostro no había podido olvidar desde que en el pasado tuvieran una breve, pero intensa, aventura. Pero cuando se volvieron a encontrar, Pete vio que los preciosos ojos verdes de Carol guardaban dentro una tristeza que él estaba dispuesto a borrar... Ahora que Pete había vuelto, y con él sus caricias, Carol no podía olvidar que tenía secretos que debían seguir ocultos. De todos modos, su corazón le aconsejaba apoyarse en sus anchos hombros, aunque fuera por una sola vez. Y entonces, se enamoró de él perdidamente.

El héroe y su amigo Wil reciben un fragmento de un antiguo manuscrito que contiene el secreto de la nueva espiritualidad que está siendo revelada a la humanidad durante la segunda década del siglo XXI. Pero el manuscrito sólo está disponible en fragmentos y para entender el sentido que tendrá para la humanidad los protagonistas iniciarán una búsqueda trepidante que los llevará a descubrir el mensaje en su totalidad.

Una historia conmovedora de un grupo de judíos refugiados que embarca rumbo a Australia durante la Segunda Guerra Mundial. Durante la Segunda Guerra Mundial, huyendo de la invasión nazi de Polonia, un grupo de judíos refugiados embarca rumbo a Australia, con la promesa de una nueva vida, en un destartalado carguero griego. Pero por temor a verse involucrados en un conflicto con la Alemania de Hitler, ningún puerto les permite atracar y el barco queda vagando entre cielo y mar, indefinidamente. Aislados en una parte de la nave, los judíos soportan la dureza del viaje, a la que se suma la...