José Joaquín Fernández de Lizardi fue un destacado escritor y periodista mexicano, considerado uno de los precursores de la novela moderna en México. Nació el 15 de noviembre de 1776 en la Ciudad de México, en una familia de ascendencia criolla y mestiza. Desde joven mostró un gran interés por la literatura y la educación, lo que lo llevó a realizar estudios en el Colegio de San Ildefonso, donde se formó en diversas disciplinas, incluyendo la filosofía y las ciencias.
Fernández de Lizardi vivió en un periodo de grandes cambios políticos y sociales en México, lo que influyó significativamente en su obra. Su vida transcurrió entre la lucha por la independencia y la búsqueda de la identidad nacional, temas que reflejó en sus escritos. A lo largo de su carrera, se destacó por su crítica social y política, utilizando la sátira como herramienta para denunciar las injusticias de su tiempo.
Su obra más reconocida es El periquillo sarniento, publicada en 1816. Esta novela es considerada la primera novela escrita en lengua española en México y un hito en la literatura hispanoamericana. La trama sigue las desventuras de un joven llamado Pedro Sarmiento, quien, tras una serie de decisiones erróneas, se ve envuelto en un mundo de corrupción, vicios y deshonestidad. A través de la vida de Sarmiento, Fernández de Lizardi hace una crítica a la hipocresía de la sociedad y retrata las contradicciones de la vida cotidiana en el México de su época.
La novela está cargada de humor y sátira, pero también es un reflejo del contexto social de México, donde la educación y la moral eran temas recurrentes. La obra no solo entretiene, sino que también invita a la reflexión sobre el papel del individuo en la sociedad y la importancia de la ética y la educación.
Aparte de El periquillo sarniento, Fernández de Lizardi también escribió otras obras significativas, como Los tres ratones ciegos y La novela del joven estudiante. Estas obras continúan con la temática crítica y social, explorando la condición humana y desencadenando un diálogo sobre la moralidad y el comportamiento de los individuos en la sociedad. Su estilo literario se caracteriza por el uso de un lenguaje claro y accesible, lo que permitió que sus obras llegaran a un amplio público.
Además de su labor como novelista, Fernández de Lizardi fue un prolífico periodista. Fundó y dirigió varios periódicos, como El Censor y El Diario de México, donde abordó temas políticos y sociales de su tiempo. Su trabajo periodístico también fue un medio para expresar su opinión sobre la independencia de México y los cambios que se estaban gestando en la sociedad. Sin embargo, su postura crítica lo llevó a enfrentar problemas con las autoridades, siendo detenido en varias ocasiones por su trabajo. A pesar de esta oposición, nunca dejó de escribir ni de luchar por sus ideales.
La vida de Fernández de Lizardi estuvo marcada por su compromiso con la justicia social y su visión crítica de la realidad. A medida que profundizaba en su carrera, se convirtió en un referente para las generaciones posteriores de escritores en México. Su legado literario no solo ha influido en la novela mexicana, sino que también ha dejado una huella importante en la literatura hispanoamericana en general.
Falleció el 21 de diciembre de 1827, pero su obra continúa siendo estudiada y apreciada. La figura de José Joaquín Fernández de Lizardi representa la lucha por la identidad y la libertad en un contexto de transformación social, y su capacidad para conectar con el público a través de su narrativa sigue siendo un testimonio de su genialidad como escritor.
En resumen, su contribución a la literatura mexicana y su papel como cronista de su tiempo lo consagran como un autor fundamental en la historia de la literatura en español, convirtiéndolo en un símbolo del pensamiento crítico y de la búsqueda de justicia en una época de cambio.