Los mejores líderes no solo lideran bien sino que también contemplan su liderazgo con el tiempo y esmero suficiente para expresar las filosofías que les motivan a hacerlo. Ya sea sirviendo en el mercado o en el ministerio, como ejecutivos o empleados de bajo rango, como personal asalariado o siervos voluntarios, los buenos líderes tienen la capacidad de puntualizar la razón fundamental de sus acciones y decisiones como si se tratase de recitar la dirección de sus domicilios.En Axioma: el autor Bill Hybels divulga las convicciones que Dios le ha dado y que han legislado la estrategia de...